"A que jamás te pusiste a ver cuánto tienes; tenemos la costumbre de llorar por lo que nos falta. Observa lo bueno que es abrir el grifo y que brote el agua abundante y cristalina; seguro que no lo pensaste, pero sí que te acuerdas cuando por algún motivo falta. Que tengas un pañuelo en el momento justo, o tus zapatos, los guantes un día de mucho frío, esta computadora que te esta haciendo llegar lo que escribo y cuántas cosas más podría nombrar...
Te pusiste a pensar cuánto nos da la Madre Tierra, porque todo sale de ella, y que nunca le agradecemos nada. Damos por sentado que si necesitamos unos tenis, un televisor, un auto o lo que sea, vamos y lo compramos; pero jamás agradecemos a quien nos dio la materia prima para que hacerlos fuera posible. ¿Sabes que respiras gracias a las algas del océano, gracias al reino vegetal, gracias a los árboles que transforman tu anhídrido carbónico en oxígeno?
¿Alguna vez les dijiste, gracias ?
Cuántas cosas más puedo nombrarte y que ni siquiera has tenido en cuenta, que das por sentado que deben estar sirviéndote, sin ponerte a pensar cuánta energía acumulada, que es la que forma todo lo material, hay a tu servicio. Empieza por agradecer todo lo que tienes y verás como lo que necesitas se va acercando solo."
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